En un día tan especial como San Valentín la elección del restaurante es crucial para disfrutar de una velada romántica. Pero cada persona es un mundo y el mismo establecimiento no tiene porqué gustar a todos. Por eso desde Madrid me enamora os hemos hecho una selección en función de vuestras preferencias. Echad un vistazo porque seguro que en esta lista encontráis el restaurante que mejor se encaja a vuestro perfil y con el que a buen seguro conquistaréis a vuestra pareja.
- Para los románticos
La bodega de los secretos es la bodega más antigua de la ciudad de Madrid y uno de los sitios más bonitos donde pasar una velada en la capital. Su cocina está llena de contrastes, pero sin olvidar su vocación mediterránea. Os recomendamos que probéis su atún rojo o su rabo de toro en uno de los semireservados de que disponen en las antiguas hornacinas donde descansaba el vino.
Pipa&Co invita desde su enclave del Paseo de La Habana a disfrutar de un local acogedor lleno de detalles. Destaca el encanto de su terraza acristalada, un espacio en el que se puede disfrutar de platos tan actuales como su huevo poché, la clásica ensaladilla rusa, sus deliciosas hamburguesas y sus postres caseros.
Otra buena y segura elección es La bienaparecida, el nuevo restaurante de Paco Quirós. Este establecimiento sigue la línea marcada por Cañadío y La Maruca de una cocina centrada en clásicos como las rabas de Santander y las anchoas de Santoña, pero que también incorpora nuevas propuestas.
- Para los que siempre están a la última
Los hermanos Torres han traído a Madrid su Dos cielos, un restaurante gastronómico situado a tan solo 300 metros del Palacio Real, que hará las delicias de los mejores paladares. Instalado en las antiguas caballerizas del Palacio, en Dos cielos se pueden degustar los platos más emblemáticos de estos dos conocidos chefs y los nuevos platos que han diseñado inspirándose en el Madrid de los Austrias. Y para los más románticos imprescindible dejar un hueco para el conocido como postre-joya.
En pleno barrio de Salamanca se encuentra Amazónico. El último proyecto del grupo El paraguas, que nos permite adentrarnos en la selva y disfrutar de su deliciosa picaña o comer en su barra de sushi. Además, este local dispone en su planta baja de un club de jazz donde continuar la velada en una atmósfera íntima y exclusiva.
A los más modernos también les proponemos una visita al restaurante A'Barra, donde el chef Juan Antonio Medina y su equipo ofrecen una cocina de temporada basada en las mejores materias primas del mercado. Si lo que buscáis es una experiencia única, os proponemos reservar la única mesa que tienen en la cocina para ver como cocinan los platos que vais a comer.
- Para los sibaritas
Aunque no apto para todos los bolsillos, Diverxo es una apuesta segura si eres de los que te gusta probar propuestas transgresoras. El único restaurante madrileño con tres estrellas Michelin nos ofrece una cocina de fusión mediterránea y china con sutiles toques japoneses.
Con dos estrellas Michelín, los hermanos Sandoval nos trasladan al universo de Coque, uno de nuestros restaurantes recomendados en Madrid. A través de cuatro espacios diferenciados realizas un viaje gastronómico en cuyo centro está la madera con la que cocinan o ahuman sus elaboraciones. Un verdadero regalo para los sentidos.
Santceloni es uno de los restaurantes más elegantes de Madrid en el que la amabilidad de su servicio y el refinamiento de sus platos lo convierten en una apuesta segura. Su cocina es fiel reflejo de su chef Óscar Velasco quien ha modernizado recetas tradicionales como la afamada terrina de ternera con foie y pistachos; el ravioli de ricota ahumada con caviar Petrossian o el San Pedro con apionabo, tomate y azafrán.
- Para los picantes
El restaurante Punto MX es uno de los mejores restaurantes mexicanos de Madrid. De la mano de Roberto Ruiz nos adentramos en la auténtica gastronomía de México, pero con una presentación propia de la cocina más vanguardista. Imprescindible probar su cocihinita pibil, sus tacos de buey gallego o el tuétano a la brasa.
Tepic es una acogedora taquería en la que degustar la cocina tradicional azteca. Decoración minimalista de un restaurante en el que su flauta de chicharrón o sus tacos son un pecado al que es casi imposible resistirse.
El guacamole casero de La Lupita es uno de los que más adeptos tiene en Madrid. En un colorido ambiente, son famosos sus tacos al carbón, unas deliciosas tortillas de maíz hechas a mano, cuyo sabor nos traslada al de las mejores taquerías de México.
- Para los clásicos
Si eres de paladar clásico, Casa Botin es tu establecimiento. Este restaurante, considerado el más antiguo del mundo, lleva más de 300 años brindando la mejor cocina castellana a sus clientes. Solo su emblemático local situado en pleno centro ya merece una visita para conocer un poco más la historia de la capital. Una visita que es redonda si se acompaña de alguno de sus platos estrella, sus deliciosos asados de cochinillo y cordero elaborados a fuego lento en el horno de leña de encina.
Otros de los restaurantes con mucha historia de Madrid es Lhardy. Un establecimiento que lleva abierto en la Carrera de San Jerónimo desde 1839 y que sigue ofreciendo uno de los mejores cocidos de la capital. La decoración clásica de sus salones lo convierten en el escenario perfecto donde disfrutar de el menú especial que han diseñado para San Valentín.
Y terminamos el trío de clásicos con La Ancha. Este restaurante, descendiente de la taberna La Estrecha que abrió sus puertas en 1930, mantiene la esencia de su cocina tradicional. Sus platos tienen personalidad y nombre propios como el escalope Armando o la tortilla velazqueña.
- Para los más internacionales
Sushita ofrece una gastronomía diferente basada en la mezcla de sabores, pero manteniendo la esencia de la cocina japonesa. Los niguiri y los maquis son deliciosos, y los rollitos de pato y sus gambas rebozadas son platos imprescindibles cada vez que se acude a uno de sus locales. Además, su decoración es muy sofisticada y le confiere un toque especial a esta celebración.
Si hablamos de cocina internacional que ya sentimos como propia pensamos en la gastronomía italiana. Andrea Tumbarello, conocido como 'el rey de la trufa', es el principal embajador en la capital y Don Giovanni es un imprescindible para aquellos que amamos los platos típicos del país transalpino. Os recomendamos su corazón de cinco quesos, sus gnocchi al pesto o sus spaghetti carbonara.
En pleno barrio de Salamanca encontramos un local cuya decoración nos traslada al Soho neoyorkino y con comida 'made in USA'. Hablamos de Dingo, un restaurante en el que no solo comer deliciosas hamburguesas, sino también excelentes carnes cocinadas al grill del carbón de encina como el Tomahawk, el T-Bone o su costillar. Un local de moda en el que puedes terminar la noche tomando una copa.