Teckel es el primer cachorro del grupo gastronómico RanTanPlan y uno de esos bonitos restaurantes donde acertar con tu visita. Un lugar para aquellos que les gusta disfrutar de las recetas tradicionales con toques vanguardistas. Vueltas de tuerca que se pueden apreciar en platos como sus Flamenquines de calabaza, pavo, cheddar y pollo, en sus Gyozas de callos a la madrileña o en su Mollete de butifarra trufada, queso gouda y encurtidos.
Este restaurante, ubicado en el barrio de Chamartín, cuenta en su salón con diferentes espacios para disfrutar de una buena comida, además de una agradable terraza cubierta. Su decoración retro con sus elegantes lámparas, sus sillas de mimbre y su vajilla de piezas diferentes nos lleva a viajar hasta los alegres años 20 londinenses.
Nosotros empezamos nuestra visita a Teckel con una media ración variada de Croquetas de sobrasada y piña, una arriesgada combinación que a nosotros nos gustó mucho. También probamos sus Croquetas de puchero, de intenso sabor. En ambos casos, las croquetas son crujientes por fuera y casi líquidas por dentro. Siguiendo la recomendación de Luis, su magnífico jefe de sala, pedimos también su Ensaladilla. Uno de esos platos que nació con el restaurante en 2015 y que se prepara a base de patata, batata y perlas de aceite. Una versión diferente que estaba riquísima.
También con su primera carta nació su Fondue de queso trufado, con patata de puchero, crema de setas y huevo con puntilla. Uno de esos clásicos renovados que sorprende al meter la cuchara hasta el fondo de la pequeña olla de cobre en la que se sirve y mezclar todos los ingredientes. Ideal de tamaño para compartir.
Para aquellos que ya han visitado Teckel, tenemos una buena noticia. Su carta ha sido renovada recientemente y, aunque ha mantenido sus platos más emblemáticos, también ha incorporado nuevos propuestas. Una de sus últimas creaciones son sus Habitas con tuétano, panceta ibérica y yema. Las terminan de preparar en la mesa, incorporándoles el tuétano en este último momento para que aquello de 'recién hecho' sea cierto en toda su literalidad.
También nuevo es su Tiradito de salmón ahumado en mesa. Un pescado que llega oculto en una nube de humo dentro de una campana y cuyo descubrimiento tiene algo de mágico. Destacamos en este caso también la calidad del salmón, algo que no es de extrañar teniendo en cuenta que su materia prima proviene de las mejores lonjas andaluzas.
Y para terminar, un Steak tartar de vaca terminado en mesa. Un detalle este último a resaltar, ya que en muchos sitios lo traen directamente preparado desde la cocina y sin preguntar al cliente el punto de picante que desea. A nosotros nos gusta que tenga un puntito picante, y por eso nos encanta que nos lo den a probar antes de terminarlo por si se ha quedado demasiado suave.
Aunque la cena fue abundante, no nos resistimos a tomar su Tarta de chocolate con crema pastelera. Un postre casero de esos que pone un dulce punto final a una agradable velada.
En definitiva, que a punto de cumplir su tercer cumpleaños, Teckel sigue manteniendo el nivel con una cocina de mercado con recetas reinventadas de algunos de los platos más tradicionales de la cocina mediterránea. Por cierto, si sus clásicos nos enamoraban, la incorporación de nuevas elaboraciones en su carta ha sido todo un acierto.
Teckel
Avenida de Concha Espina, 55
Teléfono: 91 599 64 00
Precio medio: 30-35 €.
http://www.teckelmadrid.com/
- Te puede interesar: