En Andalucía es muy típico oir aquello de "del cerdo hasta los andares", una expresión que indica que de este animal se puede aprovechar todo y que es el leitmotiv de La porcinería. Este restaurante de la calle Lagasca es el primer bistró porcino de Madrid y es curioso porque sus promotores son venezolanos y su chef italiano. Un local en el que los amantes de nuestro cerdo ibérico podemos disfrutar como un marrano en un charco descubriendo todo lo que puede aportar tan sublime animal a la cocina, desde el morro hasta el rabo.
La porcinería además tiene una decoración muy coqueta que unifica las dos áreas en las que se divide este local. Por un lado una barra abierta en la que ver cómo se preparan los platos y por el otro el bistró donde disfrutar de la comida en un ambiente más relajado. Todo un divertido acento rosa y toques vegetales.
En el primer vistazo a la carta te apetece decir aquello de "uno de cada por favor", y es que quién puede resistirse a un huevo a baja temperatura con papada ibérica, un salteado de solomillo ibérico o carrillera confitada. Nosotros empezamos con unas Alcachofas fritas con velo de panceta, que vienen recubiertas con ralladura de foie y las terminan en la mesa con un soplete.
El atento personal de sala nos dijo que no se podía visitar La porcinería sin probar su Bombón de cerdo. Se trata de una masa. tipo bao, rellena de carne picada al estilo thai con salsa kimuchi y alga wakame. ¡Top!
En este bistrot porcino también piensan en los que no son tan amantes de la carne y ofrecen un plato vegetal muy interesante. La Berenjena asada con queso payoyo y crema de tomate asado es una forma de tomar verduras sin renunciar al sabor.
Entre los segundos destacan platos como la hamburguesa ibérica o la carrillera confitada, también la Pluma asada. La preparan con pakchoi salteado y salsa bearnesa en su punto justo de cocción. Con solo ver el color rosado de la carne ya apetece hincarle el diente.
El otro segundo que tomamos fue el Lagarto ibérico, un corte del cerdo que procede de su lomo y que recibe este nombre por la forma de la pieza. Las vetas de grasa de esta carne magra le dan una jugosidad que destaca gracias al marinado con puré de yuca trufado. Una propuesta diferente y original.
Y siguiendo los andares de este rico cerdo, llegamos a los postres. Un final feliz en el que probar la tarta fina de manzana, el brownie de dulce de leche o el salami de chocolate. Nos recomendaron que probáramos su tarta de zanahoria o su Lemon Pie. Nos decantamos por el frescor del limón y acertamos. Os recomendamos que la probéis, la prepara la mujer del chef y es una delicia.
En definitiva, que si te gusta la carne, especialmente la que proviene del cerdo, La Porcinería merece una visita. En este bistrot 100% porcino, único en Madrid, tienen deliciosas propuestas para disfrutar de todas las partes del cerdo en elaboraciones diferentes. Una curiosidad, ni en carta ni fuera de ella tienen jamón ibérico.
La Porcinería
C/ Lagasca, 103
Telf.: 910 333 874
Precio medio: 30€
www.laporcineria.com