Considerado durante años uno de los 50 mejores restaurantes de América Latina
Una parrilla que respeta la tradición y la esencia de la familia argentina
Somos carnívoros y somos unos apasionados de Argentina. Conclusión: ir a disfrutar de una auténtica parrilla argentina en Madrid es un planazo. El primer local de La Cabrera, nació en 2002; y 22 años y 22 locales después, ha llegado a la capital de la mano del empresario chileno José Luis Ansoleaga. Esta 'casa de carnes' es toda una institución en Argentina habiendo sido reconocida en 2018 como la Mejor Parrilla de Buenos Aires y estando hasta cuatro años en el listado de los mejores 50 restaurantes de América Latina.
Ubicada en la calle Velázquez, en pleno barrio de Salamanca, se trata de un local de dos plantas, elegantemente decorado, con cocina vista y capacidad para 75 comensales. Un espacio lleno de recuerdos: juguetes antiguos, coches, trenes y globos aerostáticos con aire retro; raquetas y patines; máquinas de escribir que hace décadas ya no escriben, pero mantienen sus teclas brillantes, tocadiscos, radios, teléfonos de los de cable enrollado y rueda para marcar; escudos y banderas de equipos de fútbol que hicieron y hacen historia a este y al otro lado del charco.
Como os podéis imaginar, la estrella de casa es la parrilla -mitad carbón y mitad leña- donde preparan irresistibles cortes de carne argentino: tapa de cuadril, picaña, entraña, chuletones con maduraciones de entre 30 y 60 díasl o sus afamados ojo de bife y bife de chorizo. Una vez elegida la carne, en La Cabrera te muestran un mapa con los distintos puntos de cocción, para que los comensales puedan elegir la carne a su gusto. Nosotros elegimos ojo de bife (lo que sería nuestro lomo alto) y el punto de cocción un poco antes del punto. ¡Delicioso!
Mención especial merecen también la Milanesa napolitana de bife, otra receta imprescindible de allá que se hace con redondo de ternera y con jamón, mozzarella y tomates deshidratados decorando, pesto de albahaca y salsa criolla emulsionada con manzana verde o el Matambrito de cerdo, otro de sus infalible, que en La Cabrera se hace con barriguera ibérica, crocante por fuera y jugoso por dentro. Todas las carnes vienen acompañada de las clásicas salsas de chimuchurri, criolla emulsionada, persillade, salsa provenzal y de unas deliciosas patatas fritas caseras. Nuestra sorpresa fue cuando nos trajeron unos coloridos minicuencos con otras guarniciones frías y calientes, como la espuma de mostaza antigua, crême brûlée de choclo, humus de remolacha, chutney de peras o puré de coliflor, entre otros.
Para empezar, debéis probar ¡si o si! sus empanadas argentinas. Se hacen con masa auténtica traída de Argentina y aprovechando cada trozo de carne que entra en la cocina, al que añaden cebolla, comino, pimentón de La Vera y cubos fríos de mantequilla para emulsionar y que el relleno sea uniforme. Son absolutamente deliciosas y la mejor manera de trasladarte a Argentina en cada bocado. Nos recordaron de lo ricas que estaban a las de Piantao, uno de nuestros restaurantes argentinos favoritos de Madrid. Muy recomendable es también su clásico chorizo de rueda, con un tamaño considerable, por lo que es ideal para compartir entre tres o cuatro personas y sus Mollejas de corazón, en este caso de timo de ternera, que se cuecen y después se pasan por la parrilla para conseguir un acabado tierno y crujiente.
El dulce de leche es la guinda dulce para una comida increíble con distintas elaboraciones como el flan casero, panqueque, volcán, tarta de queso… Y junto a estas delicias, encontramos otras propuesta irresistible como es su chocotorta con helado invertido. Y si eres extra goloso, puedes pedir su degustación de postres y así probarlos todos.
Mención especial merecen también sus originales y vistosos cócteles de autor diseñados por el bartender mexicano Christian Conde. Algunos salen con fuego, otros con burbujas, creando nubes alrededor de un globo aerostático, servidos con palomitas dentro de un ‘vaso-toro’… Tienen además nombres tan sugerentes como el Tiki del Atlántico, Último tango en Madrid, Spicy Margarita, o la Sangría Criolla. Y para amenizar el espectáculo que ya de por sí supone comer o cenar en este restaurante donde la cuenta llega con un carrusel de chupa chups, dos veces al mes hay música en vivo; y los viernes y sábados por la noche, Dj. ¿Te lo vas a perder?
La Cabrera
Calle Velázquez, 61
Tlfno: 671 28 08 78
Precio medio: 40-50 euros
A mí la salsa chimichurri me apasiona, pero tengo que reconocer que si la carne no es buena no hay salsa que valga. Ya me lo he anotado todo para probarlo. Un beso!!
Con lo bien que trabajan la carne los argentinos, tengo que ir a hacerles una visita, ya!!
¡Qué bien saben comer carne los argentinos! Habrá que probar este restaurante.
Que cosas más ricas, la carne argentina es buenísima y esta tiene una pinta fabulosa.
Un abrazo
Concha
Espectacular, me lo apunto